“Donka”

Dadaísmo de Dada en Donka.

Europoncio Asiastático se me elucubra el viaje, un ‘treno’ de catrorce horas, casi horacias y en estado de circo-mórtico-contante, presupuesto para todo lo que y lo que no aparezca llegar.

Y parecimos un trabaleguas o un sin sentido en el viaje, y así lo reflejo, pero estirando músculos y neuronas ya llegábamos a la primera ciudad de la nuestra gira en la Rusia profunda, aperitivo de lo que esta siendo un escaparate de ciudades, que van y vienen de la mano de un circo a veces trascendental, a veces efímero y gaseoso. Voronezh, Lipetsk, Ryazan, Samara, Yekaterinburgo, están llorando la memoria de uno de sus escritores mas amados, Anton Chekov.Y nosotros tratamos de contar una historia que no conocemos, a la gente que la ha vivido. Somos clowns, actores, acróbatas, trapecistas, músicos... ingenuos artistas del movimiento y del sonido en la luz y en las sombras con un objetivo claro e imposible, pescar el alma rusa.

Ritornio el cuerno de ojo a la bravada, al mío placer del absurnio y la tarastráfola, así me sucede en este viaje de contrastes, de tacones altos y sueldos bajos, de amor por pasaporte y lujo campechano. Mas allá de Moscú se vive con el rojo delante de los ojos y la memoria en los bolsillos. Pero con una curiosidad, una inocencia y una ternura propia de los niños y del arte puro.

Nosotros, DONKA (la campanilla que se ata a la caña de pescar y así sabes cuando han picado), un espectáculo híbrido de disciplinas, inclasificable, lleno de culturas, teatro, música en directo, circo, escultura de hielo, patinaje, video-proyección,... un homenaje a un hombre de viaje, escritor visionario, doctor y pescador, un hombre que dejo su huella con zapatos grandes...

¨Saben, para nosotros los clown, el alma, esta en los zapatos¨.

El director del Chekov Festival de Moscú le dijo un día a Daniele: ¨Quiero hacer un homenaje a Anton, y quiero que lo hagas tu¨. Y Daniele contesto que sí, claro que ¨con mis palabras, con mis vivencias, con mis sueños¨.

En una Rusiovska llenoska de gentovski que niet haceski nadaski pero pensarski, esperarski a que la idea pique! Bello!

Ya no hay tiempo para tomarse su tiempo, escuchar el silencio, hacer cosas inútiles, pescar y luego echarlo de nuevo a la charca...

Quería compartir nuestra aventura junto a estos pensamientos que Donka lleva cada día en la mochila. (y algunas foticos de los carteles)

Dada